1. Planteamiento y Justificación del Problema
El sobrepeso infantil constituye uno de los problemas de salud mas importantes a nivel mundial, debido a las consecuencias que puede tener en el desarrollo físico, psicológico, social y cultural de un niño(a) una mala alimentación. Según cifras entregadas por la Organización Mundial de Salud (OMS) en 2010 alrededor de 43 millones de niños(a) menores de cinco años sufrían de sobrepeso, de estos, 15 millones corresponde a niños(as) de países en vías de desarrollo, mientras que los 8 millones restantes corresponden a niños de países desarrollados, por otra parte también debemos mencionar los datos que entregan otras investigaciones, en donde se revela que la prevalencia estimada de obesidad y sobrepeso en niños a nivel mundial es de 2.7 y 7.6 por ciento respectivamente, con cifras de obesidad que van desde el 0,2 por ciento en África sub-sahariana el 23,6 por ciento en la región de las Américas (Loaiza, 2006) Mientras que en Chile según cifras entregadas por el Ministerio de Salud (MINSAL) el año 2007 y la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas (JUNAEB) el 2010 niños(as) entre 6 y 8 años alcanzan un 21,5% con problemas de sobrepeso. Ahora bien no debemos dejar de lado las consecuencias sociales que tiene esta problemática, para Erving Goffman el niño(a) puede ser sujeto de exclusión y discriminación social debido a no ser aceptado en el medio social. (Goffman, 1898)
Cuando utilizamos el término “sobrepeso” no nos estamos refiriendo a tener unos kilos de más, ya que un gran porcentaje de población en el mundo se encuentra en esta situación, más bien nos referimos a poseer un Índice de Masa Corporal o IMC superior a 25 e inferior a 30, el IMC es el índice mas adecuado para medir si el peso es adecuado de acuerdo a la estatura, la fórmula que se utiliza para poder calcularlo es dividir el peso en kilogramos por el cuadrado de la estatura en centímetros (Kg/Cm2). Al aumentar el IMC también aumenta el riesgo de padecer otras enfermedades, tales como la diabetes, cardiopatías, problemas cardiovasculares, e incluso algunos cánceres. Pero no solo podemos hablar de los problemas de índole biológicos que acarrea el sobrepeso, ya que este también conlleva problemas psicológicos y sociales, en el caso de los niños esto los conduce al aislamiento y disminución de la autoestima, afectando así la esfera de relaciones personales, familiares y académicas, (Loaiza, 2006) el sobrepeso también impide que las personas puedan realizar actividades tan comunes como comprar en tiendas, sentarse en los microbuses, o incluso caminar algunas cuadras, ya que se cansan con mayor facilidad, en el caso de los niños(as) este sobrepeso les impide realizar actividades físicas que requieran mucho esfuerzo, por lo que terminan aislándose de la interacción con sus pares, excluyéndose socialmente.
Es importante destacar que en nuestra sociedad actual a los niños (as) los medios de comunicación los están bombardeando constantemente con mensajes de físicos muy irreales; a las niñas se les muestran mujeres que se encuentran extremadamente delgadas, llegando a verse poco saludables, mientras que a los niños se les muestran a hombres musculosos y con un físico sumamente inflado, pero la realidad es que en ambos casos estos son cuerpos muy difíciles de alcanzar, lo que significa una presión constante sobre los niños (as) que están aún en desarrollo, lo que por un lado los puede llevar a desarrollar trastornos alimenticios, y por otro lado quienes no cumplen con estos parámetros son excluidos socialmente, ya que son vistos como anormales, esto se ve reflejado en los colegios con el tema de la discriminación y no aceptación de los propios compañeros (as).
Como sabemos los niños durante el período escolar pasan por procesos complejos en el desarrollo de su identidad y su autoimagen, comienza el desarrollo de habilidades para socializar. Es importante mencionar que desde el punto de vista de la alimentación es durante este período que se establecen los hábitos, los gustos y los desagrados, muchos de los cuales van a persistir durante el resto de sus vidas, por lo que es de suma importancia tocar el tema del sobrepeso durante la etapa escolar, no solo desde el enfoque del Trabajo Social, sino que desde enfoques multidisciplinarios. Desde la perspectiva del Trabajo Social debemos entender que el sobrepeso se ha convertido en una problemática social, lo que corresponde a la materia objeto de esta disciplina, por lo que es de suma importancia que se haga cargo de enfrentar el tema de la exclusión social que viven los niños (as), en todos los contextos, pero para efectos de este estudio será específicamente en el contexto de los establecimientos educacionales municipalizados del país debido a su condición de sobrepeso. Es en este punto donde surge el problema al cual nuestra investigación debe dar respuesta y para ello hemos construido la siguiente pregunta de investigación: ¿Cómo se manifiesta la exclusión social que sufren los niños en el ámbito escolar debido a su condición de sobrepeso? Esta interrogante la planteamos debido fundamentalmente a que nos queremos abocar a como se trata el tema de la exclusión a raíz del sobrepeso que padecen los niños y niñas en los establecimientos educacionales municipalizados.
Para poder responder esta pregunta el Trabajador Social como profesional debe tener en cuenta que la problemática se debería abordar desde una lógica multidisciplinaria, ya que ésta puede ser intervenida por distintas disciplinas, las cuales serían un aporte al Trabajo Social. El Trabajador Social desde la profesión debe considerar que el sujeto es actor de sus propias necesidades y recursos, influenciado por su contexto familiar, escolar y social, teniendo en cuenta los principios de autodeterminación y de respeto por la situación a la cual se enfrenta.
Ciertamente el problema del sobrepeso infantil es un determinante en la vida de los niños y de sus familias, ya que influye de manera negativa en el marco de las relaciones sociales que se puedan desarrollar, ya que culturalmente no se está preparado para aceptar a personas que pasaron de un estado normal de desarrollo a un estado considerado anormal (Goffman, 1989), pero esta problemática social que cada vez es más frecuente a nivel nacional, puede solucionarse, quizás no a corto plazo ya que involucra un tema cultural y educacional mayor, pero si a largo plazo efectuáramos un plan factible de llevar a cabo a nivel nacional, en el cual se potencie el desarrollo de hábitos saludables frente el sedentarismo y que involucre un respaldo del marketing para un consumo saludable. Entonces, es necesario crear estrategias que estén a cargo de equipos interdisciplinarios compuestos por distintos profesionales del ámbito social, de la salud y el ámbito educativo, para de esta manera generar diversas propuestas frente a este problema, esto debido a que durante muchos años se ha creído que los niños y niñas mas “rellenitos” son más saludables, esto es una creencia muy arraigada en las familias no solo de nuestro país, sino que también en otras culturas, en donde se ve al sobrepeso como un indicador de belleza y salud. Como sociedad debemos romper con distintos patrones culturales para poder combatir el sobrepeso y la obesidad, por un lado debemos dejar el sedentarismo y la mala nutrición, promover una vida más activa y una alimentación más sana, mientras que al mismo tiempo se debe dejar de ver al sobrepeso como un signo de salud, esto se encuentra más arraigado a personas de mayor edad, que en el caso de los niños son transmitidas por sus abuelos, quienes aún creen que si el niño o la niña es “gordito (a)” va a ser mas sano.